martes, 24 de agosto de 2010

Comienzo.

Dicen que los comienzos son duros. Yo pienso que todo dependerá de las expectativas de cada uno.
Parece que está de moda (vale, hace ya bastantes años) esto de los blogs, asique, ¡Por fin!, me he animado a dar rienda suelta a mi creatividad tras el dulce cobijo que presenta una fría pantalla y varios botones que se convierten en letras.
Mi segunda tarea era el ¿De qué? (El cómo ya lo tenía solucionado). A veces tengo la impresión de que para hacer algo interesante primero debes saber lo que quieres hacer, y eso yo no lo tenía para nada claro, asique, ¿Para qué escribir un blog si no sabes de qué escribir? Barajé varias ideas, pero al final ninguna cuajaba... Y es que, ¿No os dais cuenta (le pregunto a alguien que pueda llegar a leerlo, si pasa algún día) de que el miedo a lo desconocido, al fracaso, es lo que consigue que nosotros mismos nos saboteemos? Me ha quedado una pregunta muy larga.
Ayer di un paseo. Parece algo normal, pero no me gusta pasear asique... Volviendo, en mi paseo me di cuenta de que no tengo que saber en este preciso momento en qué quiero convertir esto, solo quiero que alguien, algún día, lo encuentre útil.
Mi madre me dijo una vez que internet era como una gran ciudad. Yo acabo de comprarme el piso, y aún me estoy instalando.

Gracias.

1 comentario:

  1. Acabo de descubrir tu blog y me parece estupendo, te sigo y te invito a que te pases por el mío http://vivir-es-nacer-a-cada-instante.blogspot.com/

    ResponderEliminar